Me he colado en tu cabeza

y te has enganchado...

Todo empezó aquella noche, en aquella fiesta en la que ambos nos perdimos.

Era tarde y regresábamos de vuelta a ninguna parte. Te dije que hacía magia:

-Mira, piensa un número, el que tú quieras.... Bueno vale, como vamos a tener que hacer operaciones, que sea uno de dos cifras, que será más fácil.

- Lo tengo - dijiste

- Ese número, el que tú has querido y estás pensando, lo vas a multiplicar por tres... Wau, ahora tienes un número precioso, pero muy fácil para mí... vamos a complicarlo: Al resultado que te ha salido súmale... 6 por ejemplo ... ¿Cuál es el resultado? No me lo digas, lo sé... divídelo por 3 ahora y réstale el número que elegiste al principio... El resultado es...

Es....¹

… y en ese momento para que creyeras en la magia, te enseñé el número que estabas pensando y te mostré que lo había escrito días antes.

Te sorprendiste.

Nunca nadie había hecho magia contigo un día cualquiera y así es como me colé en tu cabeza.

Siempre quise ser la primera

Al cerebro le importan pocas cosas pero cuando descubre algo nuevo por primera vez, le entusiasma y siempre lo recuerda.

Ese día te sorprendí con algo tan simple como adivinar el número que estabas pensando… Si todas las personas a las que has conocido, te hubieran hecho trucos de magia, nunca te habrías fijado en mí.

La primera persona, la montaña más alta o la primera marca que ocupe la primera posición en la mente, serán muy difíciles de desplazar.

Esto se llama el fenómeno de Imprimación, no es magia.

Lo primero que necesitas para entrar en la mente de alguien no es un mensaje, es una mente en blanco en la que no haya hecho mella nadie más. Una mente virgen. ¿Lo entiendes?

¿Conoces a Buzz Aldrin?

Seguro que ni te suena. Este hombre solo ha sido la segunda persona en pisar la luna… buah, no tiene importancia… A ti solo te suena Neil Amstrong² que fue el primero, igual que solo recuerdas a tu primer amor o a mi, por hacer magia…

Si no has sido el primero en llegar a la mente de las personas, tienes un problema de posicionamiento.

Es bueno tener un buen producto, no me malinterpretes, u ofrecer un gran servicio, pero siempre es mucho mejor acompañar todo eso de ser el primero en llegar. Nadie se acuerda del segundo.

Te voy a regalar una idea poderosa que puedes aplicar a tu negocio:

Si no puedes ser el primero en una categoría, establece una nueva en la que puedas serlo.

Muchos marketeros te dicen que si tienes buen producto y eres lo suficientemente creativo, es cuestión de tiempo que triunfes.

Te mienten. Sin escrúpulos. Sin conocimiento.

Estos marketeros se olvidan de algo cuando te dicen esas cosas: del mercado en sí mismo, saturado, colapsado, lleno de ruido. Acuérdate de cuando me gritabas en la fiesta y no podía oírte.

Yo soy el mercado.

Hacer lo que hacen todos por llamar mi atención, es condenarte al olvido. Ya te lo dije: no me importan tus hilos, tus podcast, tus programas en Twitch por mucho gurú que lleves de invitado o invitada. No me importa tu charla, ni el cómo, ni el qué ni el cuando.

No me importas tú.

Si hoy en día quieres ser recordado, tienes que llegar a mi mente con todas tus fortalezas y debilidades. Lo siento, da igual lo que hagas o lo que ofreces. Es la era de la estrategia, del posicionamiento y aquí no basta con ser el mejor en algo, con inventar o descubrir la pólvora, o ser el más hábil en Inteligencia Artificial… Lo único que vale es que seas el primero, que llenes un espacio en blanco en mi cabeza y como no existe, que lo crees.

También hay otra opción: ser el segundo. Pero ojo, esto no es fácil.

Para ser el segundo tienes que actuar de una forma concreta para que ocupes un espacio en la mente de las personas y no te pase como a Buzz Aldrin.

Cómo ser el mejor segundo plato

Para ser un buen segundo, tienes que saber plantarle cara al primero, debes desafiarlo y debes ser todo lo opuesto a él.

Un buen número dos nunca debe tratar de emular al líder.

Verás, durante muchos años, Burger King no conseguía hacer frente a McDonald´s y esto sucedía por una sencilla razón: quería ser McDonald´s.

Tu no puedes hacer que alguien se olvide de mí siendo yo e imitándome en todo, ¿verdad?

Esta obviedad que te acabo de contar es algo en lo que no cae casi nadie y por eso todos y todas nos comportamos prácticamente igual en el medio digital. Luego están las personas a las que nos dirigimos: acosadas, abrumadas e increpadas por todos nosotros que somos clones, a la vez que nos creemos que somos el culo del mundo.

Un amigo que es bar tender, me decía este verano que se estaba especializando en bodas porque es un negocio rentable: montar la barra libre .

- Me encanta, porque además todas las parejas de novios me dicen que su boda va a ser super diferente al resto y … sinceramente, todos acaban pidiéndome lo mismo… - decía mi amigo (Hola José).

Previsibles. Lamentables… La IA no es que nos vaya a sustituir, es que podría hacerlo sin pestañear y sin programación porque hasta yo que solo soy una humana, sé cómo vas a actuar cuando me dices que tienes una idea…

No me sorprendes. Sigues los pasos que sé que vas a seguir y te convences a ti mismo de que tienes la mejor idea del mundo, la más original, la más creativa… la más común al fin y al cabo.

Estábamos hablando de hamburguesas. Ya me centro.

Una marca que quiera ocupar la segunda posición en la mente de las personas y quiera hacerlo de una manera fuerte y competitiva, debe ser todo lo opuesto al líder (esto ya te lo he dicho y te lo repito, para que lo grabes a fuego).

Piénsalo:

#1 Coca-cola: gente mayor, felicidad, valores tradicionales, familia….

#2 Pepsi: gente joven, música, punky, amigos…

Lo primero que hace bien Pepsi, es reconocer el liderazgo de Coca-cola.

Si tu niegas la primera posición a quien ya la tiene, la gente podría preguntarse que por qué si dices ser el primero, no tienes más ventas, haces mejor marketing o eres quien tienes más seguidores.

Nunca vayas de: “Somos los mejores en…” si no eres el primero. Es ridículo y quedas como imbécil.

Lo segundo que hace bien Pepsi, es que busca ese enfrentamiento y rivalidad: busca ser lo opuesto al líder para entrar en la cabeza de la gente. Si es lo mismo, jamás entrará.

Marketing es como la política o como la vida: todo Yin, necesita su Yan. Todo Dios, necesita a un Diablo y todos los Conservadores, necesitan a un Progresista para que tenga sentido su causa.

¿Sabes por qué nunca le irá bien a partidos que son excisiones de la derecha o de la izquierda? Precisamente porque son espejos de los dos partidos principales. La gente necesita polarización y cosas nuevas. La luz necesita oscuridad y el héroe necesita a un villano.

Deja de tirar balas haciendo lo mismo que el líder. Deja de imitar al que descubrió el camino. Deja de ser como todos, que me aburres mucho.

Piensa en lo que haces: en tu negocio, tu marca personal, tu empresa o esa próxima charla que te estás preparando… ¿En serio vas a hacer lo que hacen los que son más reconocidos que tu en la misma categoría? …

Piensa en ese evento que patrocinas: ah, genial, vas a poner un stand como todos. Te han vendido tu logo en la web y vas a dar merchan… ¿no me digas?… bien, qué creativo!.

No has aprendido nada.

No te atreves, no te arriesgas, vives con el efecto borrego: no me voy a salir del rebaño no sea que me juzguen.

Hoy te he explicado cómo ser el segundo plato… un segundo plato apetecible.

El próximo día, te cuento cómo entrar en una mente virgen: cómo crear un nuevo espacio en la cabeza de las personas para ser el primero, pero solo lo haré si empiezas a cuestionarte cosas en tu vida según me lees.

Si no vas a hacer nada, hazte un favor al menos: no vuelvas por aquí. No te quiero como lector o lectora. Quiero a las personas justas, no a la masa.

Tú eres masa.

Ahora solo dime una cosa:

¿Crees en la magia?

1. (haz la operación para sorprenderte: piensa un número de 2 cifras: (*3 + 6 )/ 3) —> sé el número que has pensado y lo he puesto en un tweet

Ana Mata @MataTweet

Dos

2. Imagen de mi charla en Trafffic Girona, hablando de posicionamiento y del fenómeno de Imprimación.